En la largada, Werner exhibió toda su jerarquía: exprimió el potencial de su Ford y en llegando a la segunda curva del trazado le arrebató el liderazgo a Juan Bautista De Benedictis.

Ponce de León, a bordo del Ford alistado por su propia estructura, pudo avanzar dos posiciones en el inicio de la prueba y, rápidamente se situó sexto detrás de Juan Martín Trucco.

Matías Rossi, luego de haber quedado fuera de competencia en la serie volvió y largó en la cuadragésimo primera colocación. Al cabo de siete giros, el nacido en Del Viso ya marchaba en el puesto 27.

Canapino y Ardusso, los dos mejores pilotos de la temporada pasada, se encontraron en pista en franca pelea por la tercera colocación. Durante más de diez vueltas, la defensa del santafesino fue superior a los intentos de sobrepaso del arrecifeño del Jet Racing, lo que les permitió acercarse a Trucco, Ponce de León y Mazzacane, respectivamente.

En el décimo segundo giro, el auto de seguridad ingresó por la detención de Julián Santero, el mendocino del Coiro Dole Racing.

El relanzamiento fue electrizante: De Benedictis arriesgó hasta el límite, pero no pudo dar cuenta de Werner, que se defendió con todos sus artilugios. Canapino, a su vez, se puso a la par de Ardusso por casi media vuelta y lo superó en el ingresó a la chicana. La diferencia que le habían sacado los Ford a Canapino fue muy grande y no se pudo acortar en la segunda mitad de la carrera.

Juan Martín Trucco edificó un gran rendimiento luego de partir quinto y finalizar tan sólo a un escalón del podio. Ardusso, sobre el final de la carrera tuvo un problema en la batería de su Torino y quedó relegado cuando venía cuarto. El representante del Renault Sport Torino Team concluyó octavo y es el escolta del campeonato que lidera Castellano.

Werner fue eficaz: pegó el zarpazo cuando tenía que hacerlo y se aseguró un triunfo vital, que no sólo lo habilita a pelear por el certamen sino que, además, lo erige como el referente de la marca en el sexto escalón del campeonato.