Canapino, la estrella de los 1000 kilómetros
19 AGO 18 / 20:36 hs.

Canapino, la estrella de los 1000 kilómetros

Agustín Canapino, el campeón del Turismo Carretera, ganó una increíble final de los 1000 kilómetros del Gran Premio Ciudad de Buenos Aires junto a Federico Alonso y Martín Ponte. Leonel Pernía y Facundo Ardusso, con sus respectivos invitados, completaron el podio.

La final de la segunda edición de los 1000 kilómetros de Buenos Aires comenzó vertiginosa, con un ritmo poco esperando para una prueba de 178 vueltas.

Mariano Werner, que largó tercero, dio cuenta rápidamente de Ardusso y de Gassmann (invitado de Castellano) para convertirse en el nuevo líder de la prueba. Juan Marcos Angelini, en la primera vuelta, rompió el motor de su Dodge y debió abandonar. Esa acción se repitió, pero en el Chevrolet de Diego De Carlo, quien ingresó a hacer la única reparación permitida por el reglamento particular de la prueba para volver a la competencia.

Juan Martín Bruno, con la Dodge del equipo JP Carrera, tuvo un roce con Nolesi. Ambos quedaron fuera de pista en la “S del ciervo” y generaron el primer ingreso del auto de seguridad, situación que derivó en la entrada de muchos autos a reabastecer combustible como Urcera, Rossi, Fontana, Okulovich y Mangoni, entre otros.

Guillermo Ortelli, el siete veces campeón del Turismo Carretera, exprimió el potencial de su Chevrolet y pudo trepar a la cima tras dejar atrás a Werner, después del relanzamiento.

Pero toda la atención la llamó Josito Di Palma, el arrecifeño que largó como invitado con la Dodge de Valentín Aguirre porque, en 22 vueltas, trepó desde el vigésimo octavo puesto hasta el liderazgo de la prueba.

El primer cambio de pilotos se dio en la vuelta 26: Ortelli ingresó a boxes y le cedió su butaca a Gentile.  Cuatro giros después, Bruno volvió a despistarse, ingresó el pace car y en el relanzamiento Gastón Mazzacane quedó como puntero. Pero pocas vueltas pudo encabezar el nacido en La Plata, ya que un toque de Juan Pablo Gianini le provocó un fuerte despiste.

Santiago Álvarez, en la Dodge de Valentín Aguirre, ingresó puntero al cambio de pilotos en los boxes y le cedió el turno al titular. Entonces Damián Markel, integrante del trío encabezado por De Benedictis, heredó la punta aunque tuvo pocas vueltas de velocidad, al principio, porque el Ford de Rossi sufrió un problema en el embrague y obligó al ingreso del auto de seguridad.

Cuando se relanzó la prueba, Martín Ponte (en el Chevrolet de Canapino) le arrebató la cima de la carrera y le permitió al actual campeón volver a pista en el primer lugar. En la discusión del pelotón de punta se sumaron Mario Valle (Santero), Tomás Urretavizcaya (Ardusso) y Altuna (Urcera).Pero el que se impuso fue el Urretavizcaya, el nacido en Chacabuco, porque pudo hacer prevalecer el ritmo del Torino por sobre el del Chevrolet conducido por Ponte.

El desarrollo de la final se presentó accidentado. Trece autos de seguridad marcaron el ritmo de una prueba pausada y con pocos tramos de velocidad constante.

Cuando le tocó el turno de subirse a Federico Alonso, dos problemas parecieron atentar contra el Chevrolet que luce el número uno en sus laterales: en primera instancia debió ingresar a boxes para ajustar un neumático que había quedado flojo y, después, llegó con lo justo a los pits luego de que una falla en la bomba de nafta casi lo dejara a un costado de la pista.

Ese fue un punto de inflexión mientras la prueba avanzaba y Ardusso, después Santero y finalmente Urcera, se adueñaban de la punta.

En el giro 143, Santero con la Dodge del Dole Racing tocó a Trosset en la horquilla y, luego de bajada la bandera a cuadros, esa incidencia derivó en un recargo que lo desplazó del segundo escalón del podio al séptimo puesto.

José Manuel Urcera no pudo mantener su ritmo en la punta porque a menos de diez vueltas para el desenlace, se quedó sin combustible y le cedió su lugar a Pernía, quien con un diseño nuevo en el Torino del Hamilton Laboritto, acaparó todas las miradas.

A este capítulo final de los 1000 kilómetros le quedaba un golpe de escena fundamental. Canapino se volvió a subir al auto y desde ese momento, en el que estaba undécimo en el clasificador, comenzó a avanzar a pie firme.

Cuando llegó al pelotón de vanguardia dio cuenta de Ortelli -quien culminó sexto-, luego hizo lo propio con Santero y Urcera. Con una contundencia propia de un campeón, Agustín continuó con su excelente rendimiento, sobrepasó a Pernía y luego sostuvo el liderazgo hasta la bajada de la bandera a cuadros, sumando así su primer triunfo en el año y, quizá, el más importante.

Los 1000 kilómetros de Buenos Aires, finalmente, encontraron a Ardusso en el tercer escalón del podio. Además, cinco pilotos aseguraron su ingreso a la Copa de Oro Río Uruguay Seguros: Castellano; Ardusso; Canapino; Ortelli y Werner.